He querido añadir un artículo que plasme los puntos más importantes que se han hablado en el debate, pero sobre todo las partes más técnicas pero con un lenguaje más llevadero y a la vez una visión de la realidad por alguien que entienda del tema. Y por ello he pedido a mi amigo Guillermo García Berdejo (licenciado en Administración y dirección de empresa y Derecho por UPF) que me escribiese el siguiente artículo/carta de opinión al respecto:
La verdad es que me pareció bastante aburridillo. Yo creo que hubo poca "interacción": eran como turnos muy cerrados. Me hubiera gustado un rollo más de "diálogo" y con un poco menos de cronómetro. Vi demasiada formalidad.
Esta mañana he visto que la encuesta que han hecho los de A3 daban como vencedor a Solbes. La verdad es que estas encuestas son un poco una parida, pero creo que es una encuesta bastante realista. Solbes fue un poquillo aburrido, pero Pizarro no le supo "dar emoción". Yo creo que no se maneja mucho en lo que a política se refiere. Pizarro tiene dos ventajas (creo yo): que sabe bastante del tema (más que económico, industrial) y que es muy directo y no se anda con circunloquios. Muy aragonés: al pan, pan, y al vino, vino. Ahora bien, yo creo que el formato le quitó el brillo a este hombre. La verdad, es que quedó bastante deslucido.
Por otra parte, Pizarro lo tiene muy complicado. Esta legislatura ha sido de avances económicos importantes, tanto en el PIB como en el paro, siguiendo la tendencia que inició el propio Solbes en 1995. Los datos de paro son históricamente buenos.
El problema es que le falta mucha calidad al crecimiento. España es el país de las Pymes-chiringuito, del cobrar por "intermediar" y no por "producir", el de la competencia (frágil) en precios y no en calidad, etc.
Yo creo que en España ha pasado una cosa que todos entenderemos: si tenemos unos ahorros de 100.000€ y los metemos todos en acciones de una empresa, el día que esa empresa vaya bien, se nos va a doblar con facilidad lo invertido, pero el día que nos vaya mal, vamos a ver las estrellas. Y si encima no es que hayamos comprado las acciones con nuestros ahorros, sino que hemos comprado a cargo de los beneficios esperados futuros, pues ahora directamente es que ya no podemos pagar.
Aquí ha pasado un poco eso. El proyecto de vida del español se limitaba a comprarse un palomar en vete a saber qué cascarral (eso sí, con bus directo hacia la Plaza Cataluña) con la esperanza de revenderlo por el doble en unos años. La gente te decía "y con lo que me ahorre del alquiler pago la hipoteca, y a los cinco años se me habrá revalorizado un X%, y me compraré uno más grande...", y así como el cuento de la lechera, los pisos iban pasando de mano a mano por el doble de precio, pero seguían siendo el mismo piso, igual de malo e igual de cuchitril que antes. ¿Cómo pretenden que un piso malo doble el valor si el piso por sí mismo no añade valor? El piso es para vivir, no para revender y revender. Parece que ha costado un poco entender eso. Tampoco ha calado la idea de que raramente una persona de 20 años puede estar pensando en comprarse pisos: primero porque la hipoteca le cierra puertas laborales (¿Qué pasará si te quedas en el paro y te sale un trabajo en Cuenca? Y nosotros porque vivimos en BCN, que por mal que vaya, siempre hay mucha actividad, pero hay gente que se compra un piso en Lugo, y te viene la crisis, y esa persona se queda en Lugo cobrando el paro en vez de irse a Barcelona a currar), y lo segundo, porque raramente una persona en sus primeros años de trabajo va a tener poder adquisitivo para comprarse un bien inmueble.
En España, el dinero se podría haber invertido en hacer empresas que fueran generando valor y riqueza en forma de dividendos / nóminas / o crecimiento de su negocio. Ahí sí que se hubiera podido vender la empresa por el doble, porque obviamente cuando fundas una empresa, ni hay clientes, ni hay productos, ni hay nada, pero cuando empiezas a expandirte, y tu marca se conoce, y empiezas a ganar clientes, obviamente eso se paga. Pero en su lugar, se ha invertido en un bien que no genera nada. Todo su incremento de valor es meramente virtual, basado en expectativas futuras de precio.
España ha estado creciendo porque la gente se auto-percibía más rica. "Amonos al Carreful a comprá de tó, que ahora somos propietarios del piso", y hala, la gente con el cuento de que en X años iban a vender el piso por el doble, pues venga a gastar. (Si te fijas, el PIB tiene cuatro componentes: consumo privado, gastos del Estado, inversión, y exportaciones netas, y quien ha tirado del carro es el primer componente, o sea, las compras en el Carrefoul.)
Ahora que llega la crisis, nosotros estamos peor preparados que otros países. En otros países, si producen coches, pues a lo mejor el coche en temporada baja te lo acaban vendiendo por menos dinero. El problema es que en España no vendemos nada. Nuestra economía es virtual y "de intermediación" (fíjate cuánta gente dedicada a comprar y vender fincas). El día que se acaba el boom, se acabó el "gitaneo": otros nos seguirán vendiendo coches, pero nosotros ya no podremos seguir con el negocio del "escolta tu, que la veïna m'ha trucat que vol vendre el pis, i és molt mono, així tipus loft", y luego resulta que el loft es el hueco de la escalera, que le han puesto dos paredes y te lo quieren vender a precio de suite en el centro de Barcelona, previo pago de la comisión a la agencia, que no ha hecho nada más que colgar un cartel hecho con Word y colgarlo en el escaparate. Como puedes imaginar, eso no se puede sostener. No se puede estar toda la vida vendiendo humo. Detrás de toda economía tiene que haber una producción tangible, y no una mera producción virtual de esperanzas futuras. (Eso para la bolsa, que es precisamente eso: comprar flujos de caja futuros esperados de una empresa, o sea, "ilusión" de que una empresa va a hacer mucho dinero.)
El problema es que en España esta economía ha generado muchos problemas futuros. ¿Qué ocurrirá ahora con los inmigrantes que han entrado? ¿Y con los parados autóctonos? Tanto unos como otros son difícilmente reciclables. Cuando un tío se ha pasado 10 años poniendo ladrillos en obras sin tener ni la ESO, el día que se acaben los ladrillos, esa persona va a ser incapaz de hacer nada más.
Yo creo que hay grandes temas económicos que no se tratan. Los diferentes gobiernos trabajan la economía presente, pero no siembran nada para el futuro. Habría que plantearse varios temas pero ya:
- Educación (y no me refiero a la 0 a 3 años, como dijo Solbes): España está educando con el chip de los años 60, cuando el futuro de España era traer a una fábrica extranjera que venía a España porque aquí los salarios eran más bajos. A la gente le enseñabas a poner tornillos, y hala, a currar a la fábrica. Ahora hay un problema, porque España está tendiendo a una economía más avanzada. Nosotros no tenemos industria, pero sí tenemos líderes mundiales en banca (ej: Santander ya es el 10º banco de EEUU y líder en Texas, Luisiana, Arizona, Florida...), en telecomunicaciones (ej: Telefónica, 3ª operadora mundial y única occidental presente en China), en infraestructuras (ej: Ferrovial, líder mundial de gestión de aeropuertos, gestión del metro de Londres, gestión de autopistas en Chicago...), en energía (ej: Iberdrola es la 4ª energética mundial, y Acciona es pionera en la generación de biocombustibles y de energías renovables), etc. La educación debería ser enfocada hacia un país de servicios avanzados: arquitectos, economistas, ingenieros... Gente que pueda trabajar en esas grandes empresas (y gestionarlas desde España) desarrollando proyectos en todo el mundo.
- Energía y agua: parece una chorrada, pero estamos fatal. ¿Cómo mantenemos la infraestructura turística y los millones de casitas con jardín y piscina que les hemos vendido a los alemanes, si ahora nos van a cerrar el agua en verano porque no llueve? ¿Seguirán viniendo los guiris - sobre todo los de calidad - si el campo de golf en ver de green tiene brown porque no se puede regar?
- Pensiones: hay que trabajar más (no jubilarse a los 55 años) e incentivar a la gente a que participe. Hoy el sistema de pensiones es incoherente, porque en lugar de premiar con mejores pensiones al que más trabaja y más dinero "mete en la hucha", al final acaba saliendo beneficiado el que no pega ni golpe. Mucha gente chupa del bote sin meter pasta.
- La inmigración es un “problema”, porque al ser sueldos muy bajos, contribuyen muy poco, y por lo tanto se hacen falta muchos inmigrantes para pagar una pensión. Sin embargo, cuando estos inmigrantes se jubilen, cobrarán relativamente más de lo que han aportado. El problema es si podrán pagarse las pensiones de todos los que ahora entran viniendo a España siendo jóvenes. En 30-40 años, se nos empezarán a jubilar inmigrantes todos de golpe. A no ser que ellos sigan teniendo muchos hijos (poco probable) y que esos hijos tengan grandes trabajos donde cobren muy buenas nóminas, el sistema estará jodido.
- Seguridad jurídica: en el caso Endesa, las autoridades de la competencia y los reguladores (tanto españoles como europeos) se han pasado las leyes por el arco del triunfo, y han dicho lo que políticamente les ha venido bien. Todo eso no es bueno. El inversor extranjero debe ser tratado como el nacional, y los reguladores deben ser rigurosos y no oportunistas como lo fueron.
Creo que no se enfocan bien los problemas. Mi impresión es que Solbes va a ser keynesiano en la próxima legislatura, o sea, va a intentar mantener el crecimiento del PIB haciendo que el Estado gaste más (ya veréis, AVE hasta en Moralanova) y "subvencionando" el consumo privado (véase la rebaja de 400€ para que la gente no deje de ir al Carreful y se lo gaste todo).
El problema se palia pero no se soluciona.
En fin, este es mi resumen un poco de mis frustraciones post-debate.
Guillermo García Berdejo.
